domingo, octubre 18, 2009

UNA IGLESIA DE SANA DOCTRINA



Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la SANA DOCTRINA, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias [2Timoteo 4:3].¿En mi congregacion se practica la Sana Doctrina?

¿Usted se preguntará? ¿Porque es importante saber en dónde me debo congregar?

La respuesta es porque las personas que asisten a una iglesia con falsa doctrina no serán salvos, ni ellos como ovejas que escuchan la falsa doctrina, ni tampoco sus ministros que predican falsamente o tuercen, para su propio beneficio la Palabra de Dios. El Apóstol Pablo le recomienda a Timoteo: Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina; persiste en ello, pues haciendo esto, te salvarás a ti mismo y a los que te oyeren [1Timoteo 4:16]

Es obvio entonces, que quienes hacen lo contrario de lo que dice Timoteo, no encontrarán su salvación; ni los predicadores que enseñan doctrinas falsas, ni sus seguidores que los escuchan.

I- LA SANA DOCTRINA

Muchos seres humanos, incluso, la inmensa mayoría de los que se hacen llamar cristianos desconocen qué es La Sana Doctrina, desconocen a qué se refiere, desconocen si se trata de palabras bíblicas e incluso desconocen si están en una iglesia que prepare a sus asistentes en la sana doctrina.

¿Qué es la sana doctrina?

¿Cómo reconocer si en una iglesia se imparte doctrina bíblica? [Sana doctrina] o aquellas iglesias que se están desviando o ya se desviaron.

Cuando hablamos de sana doctrina hablamos de "sanas palabras", "sana enseñanza", enseñanza no tergiversada, no adulterada, ni manipulada con propósitos que justifiquen alguna manera determinada de actuar. La Sana Doctrina es la doctrina bíblica, tal cual está escrita. Sin desvíos del fundamento bíblico.

El actuar de acuerdo a la sana doctrina le garantiza a cualquier iglesia cristiana su santidad como iglesia. Recordemos que "santidad" significa "separación" de las cosas mundanas. Una iglesia que no enseña sana doctrina es una iglesia pagana, pues no retiene lo que ha aprendido, sino que se ha hecho llevar por lo que el mundo quiere, no lo que Dios quiere y manda.

¿Qué quiere el mundo? Desplazar la sana doctrina por "alabanzas" o sea desplazar el conocimiento bíblico por manifestaciones emocionales, desplazar la doctrina de Dios por "milagros", desplazar la evangelización, es decir la oportunidad de hablar a otros de Cristo entregándole las buenas noticias de la salvación, por los "conciertos cristianos", por los espectáculos, por el desorden y el ruido; manipulados por supuestos "salmistas" que no evangelizan, sino que han entregado su vida a los demonios; de modo de arrastrar tras de sí la mayor cantidad de personas; creando shows e inventando espectáculos en los altares y contaminando los púlpitos de legiones de demonios; arrastrando a la gente al adormecimiento, arrastrándolos a la confusión; remplazando la enseñanza por las baterías y los instrumentos musicales, las "peregrinaciones" por el aprendizaje de quien es Cristo y lo que hizo en la cruz por la humanidad y de sus propósitos. Hoy en día se ven a los predicadores cargados de títulos de aquí y del más allá, doctores, teólogos, licenciados, científicos de la palabra, y un sinnúmero de títulos y de honores, más en el púlpito no dicen nada, solo confunden a la gente; son sepulcros blanqueados y llenos de huesos de muertos; fariseos hipócritas.

La sana doctrina es clara. El Apóstol Pablo en su segunda carta a Timoteo dice: Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús. Guarda el buen depósito por el Espíritu Santo que mora en nosotros [2Timoteo 1:13-14].

Hoy en día la sana doctrina se ve en un pequeño grupo de iglesias, normalmente pequeñas, cuyos pastores son cien por ciento bíblicos. Es decir, estos pastores retienen las sanas palabras del evangelio y guardan lo que el Espíritu Santo nos ha entregado desde el momento que creímos en Jesucristo y le aceptamos.

En el Antiguo Testamento se habla de lo que ocurre actualmente en las "mega iglesias" mantenidas por "mega millonarios" que se hacen llamar pastores, profetas o salmistas. Es fácil de identificarlos porque ellos aparecen en televisión haciendo todo tipo de pródigos, milagros, presentando e introduciendo música pagana como si se tratara de música cristiana, bailes sensuales, etc. Estas personas son tremendos actores de Hollywood, todo "en nombre de Jesús".

"Sus sacerdotes violaron mi ley, y contaminaron mis santuarios; entre lo santo y lo profano no hicieron diferencia, ni distinguieron entre inmundo y limpio;" [Ezequiel 22:26].

"Se destruyó, cayó la tierra; enfermó, cayó el mundo; enfermaron los altos pueblos de la tierra. Y la tierra se contaminó bajo sus moradores; porque traspasaron las leyes, falsearon el derecho, quebrantaron el pacto sempiterno. [Isaías 24:4].

 En el Nuevo Testamento Jesús declara: ¿No profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les declararé: Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad [Mateo 7:22-23].

¿Por qué Jesucristo no reconocerá a éstos? ¿Por qué Jesucristo apartará a estos "pastores", "sacerdotes", "salmistas" o aquellos que se hacen llamar profetas?

Sencillo, por no guardar la sana doctrina. Por apartarse de ella y remplazarla por la "alabanza"; es necesario adorar a Dios por lo que Él es, pero debe hacerse en espíritu y en verdad [Jn 4:23-24], no por dinero. Por su tolerancia hacia la mundanalidad, por no haber guardado el pacto sempiterno [pacto= alianza, testamento]. Por dedicarse a hacer "espectáculos televisivos", solo por amor al dinero, por dedicarse a lucir y saber cómo se ven en el púlpito, y no a salvar almas hablando del pecado y del arrepentimiento a los perdidos, cegados por el diablo. De hecho existen varios canales de televisión, incluso por satélites pagados por monopolios de gente que no está convertida a Cristo, que se hacen llamar cristianos.

Las palabras del Apóstol Pablo cuando nos manda, al igual que a Timoteo:

"Te encarezco delante de Dios y del Señor Jesucristo, que juzgará a los vivos y a los muertos en su manifestación y en su reino, que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina. Porque vendrá tiempo cuando no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas. Pero tú sé sobrio en todo, soporta las aflicciones, haz obra de evangelista, cumple tu ministerio." [2Timoteo 4:1-5]. La Palabra de Dios es clara; en el tiempo del fin se apartarán de la verdad.

II- CARACTERÍSTICAS DE LAS IGLESIAS CON VERDADERA DOCTRINA:

1] La conducta de los Predicadores debe ser igual a la conducta requerida por la Biblia, en otras palabras, los Ministros deben de hacer o practicar lo que predican, poniendo el buen ejemplo bíblico y no solo predicando bien, bonito y gracioso. El verdadero Ministro debe ser Siervo de Dios que se despoja de todo para servir a Dios y a las ovejas y no se aprovecha y despoja a las ovejas. Además, debe ser un buen administrador de los misterios de Dios. El apóstol Pedro dice: Cada uno según el don que ha recibido, minístrelo a los otros, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios [1Pedro 4:10]. Además los dirigentes no deben de ser Nicolaítas porque Dios aborrece a los Nicolaítas. [Apocalipsis 2:6,15]. Los Nicolaítas son dirigentes de iglesias que se comportan como capataces, patrones o dueños de las ovejas de Cristo, mirando cuanto diezmo pones en la cesta. Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por ganancia deshonesta, sino con ánimo pronto; no como teniendo señorío sobre los que están a vuestro cuidado, sino siendo ejemplos de la grey. [1Pedro 5:2-3]

2] Los Líderes deben de guardar y obedecer los mandamientos que dejó nuestro Señor Jesucristo en el Nuevo Testamento. Explicando bien a sus ovejas sobre la diferencia que existe entre las etapas de la ley de Moisés y la ley de Cristo. Pablo le aconseja a Timoteo: Retén la forma de las sanas palabras que de mí oíste, en la fe y amor que es en Cristo Jesús [2Timoteo 1:13]. La ley de Dios a través de Moisés fue para los Antiguos Israelitas, y la ley de Dios traída al mundo por nuestro Señor Jesucristo es para todas las naciones. Y por quien recibimos la gracia y el apostolado, para la obediencia a la fe en todas las naciones por amor de su nombre [Romanos 1:5]. Un Nuevo Pacto hecho por Dios mismo hacia la humanidad [Jeremías 31:31]: He aquí que vienen días, dice Jehová, en los cuales haré NUEVO PACTO con la casa de Israel y con la casa de Judá. Cuando dice Nuevo Pacto; el Viejo Pacto quedó abolido [Hebreos 8:13]: Al decir: NUEVO PACTO, ha dado por viejo al primero; y lo que se da por viejo y se envejece, está próximo a desaparecer. El Nuevo Pacto está escrito con sangre en la cruz del calvario [Hebreos 12:24]: a Jesús el Mediador del NUEVO PACTO, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel.

3] Los Ministros deben de enseñar y practicar principalmente la doctrina de la Gracia y de la Fe en nuestro Señor Jesucristo y no practicar o poner en vigencia los mandamientos del Antiguo Pacto. Debemos de entender que ya no estamos bajo la ley Mosaica, ahora estamos bajo la ley de la Gracia y de la Fe en Nuestro Señor Jesucristo. Tenemos un altar, del cual no tienen derecho de comer los que sirven al tabernáculo [Hebreos 13:10].

Y que de todo aquello de que por la ley de Moisés no pudisteis ser justificados, en él es justificado todo aquel que cree [Hechos 13:39].

4] Los mandamientos de la ley de Moisés aunque son santos y dados por Dios ya no están vigentes para nosotros los cristianos, de acuerdo a lo que reiteradamente escribió el apóstol Pablo en sus epístolas, por lo que las iglesias cristianas verdaderas no deben poner en vigencia esos antiguos mandatos. Queda, pues, abrogado el mandamiento anterior a causa de su debilidad e ineficacia [pues nada perfeccionó la ley], y de la introducción de una mejor esperanza, por la cual nos acercamos a Dios [Hebreos 7:18-19].

Porque la ley constituye sumos sacerdotes a débiles hombres; pero la palabra del juramento, posterior a la ley, al Hijo, hecho perfecto para siempre [Hebreos 7:28].

Dios sabía que el primer pacto era solo una guía para llegar al pacto perfecto. Porque si aquel primero hubiera sido sin defecto, ciertamente no se hubiera procurado lugar para el segundo [Hebreos 8:7].

Es preciso hacer notar que tanto en el Nuevo como Antiguo Testamento Dios le dijo a Moisés que levantaría un profeta dentro del pueblo de Israel y que si alguien no le hiciere caso sería eliminado del pueblo santo. Porque Moisés dijo a los padres: El Señor vuestro Dios os levantará profeta de entre vuestros hermanos, como a mí; a él oiréis en todas las cosas que os hable; y toda alma que no oiga a aquel profeta, será desarraigada del pueblo [Hechos 3:22-23].

Profeta les levantaré de en medio de sus hermanos, como tú; y pondré mis palabras en su boca, y él les hablará todo lo que yo le mandare.

Mas a cualquiera que no oyere mis palabras que él hablare en mi nombre, yo le pediré cuenta [Deuteronomio 18:18-19].

5] Las ofrendas autorizadas por el apóstol Pablo dentro de las iglesias cristianas deben de estar destinadas exclusivamente para:

A] Socorrer a los hermanos pobres y los grupos que han caído en adversidades, que incluyen a los hermanos en la fe, huérfanos, viudas, ancianos, niños desprotegidos, enfermos y otros que evidencien su necesidad por haber sufrido algún desastre natural o personal.

Cada primer día de la semana cada uno de vosotros ponga aparte algo, según haya prosperado, guardándolo, para que cuando yo llegue no se recojan entonces ofrendas [1Corintios 16:2].

Esta ofrenda autorizada por el apóstol Pablo no fue para él, por el contrario fue destinada para socorrer a los cristianos pobres de Jerusalén, quienes sufrieron hambruna debido a la invasión Romana. Esto es un ejemplo de un verdadero apóstol de Cristo. La Iglesia Cristiana practica la ayuda mutua

B] La verdadera Iglesia Cristiana solicita también ofrendas para poder divulgar las Buenas Nuevas del Reino de Dios y la salvación de las almas a través de Cristo. La palabra de Dios debe de ser dada gratuitamente como lo dice el Apóstol Pablo: ¿Cuál, pues, es mi galardón? Que predicando el evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no abusar de mi derecho en el evangelio. [1Corintios 9:18].

Los derechos que menciona aquí el apóstol Pablo no se refieren a cobrar por predicar dentro de una iglesia, más bien se refieren al derecho que tiene el evangelizador o misionero que va a predicar el evangelio a otro país u otra área lejana, de que se le cubran sus gastos de viaje por parte de la iglesia que lo envía. Hoy en día la mayoría de los predicadores cobran y la mayoría de los músicos o salmistas cobran grandes cantidades de dinero como si fueran artistas de Hollywood.

6] La verdadera Iglesia Cristiana está representada en el [Apocalipsis 12.1] por la mujer vestida de sol, con la luna bajo sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas. Vestida de sol porque es una iglesia de luz [verdades] y no de tinieblas [mentiras]. La luna representa la luz de Dios en medio de la oscuridad del mundo de pecado. La corona representa el Reino de Dios y las doce estrellas representan los doce fundamentos de la verdadera iglesia que son los doce apóstoles de Cristo, [Apocalipsis 21:14]. Por el contrario la falsa iglesia o iglesia apóstata, está representada en el Apocalipsis por la mujer ramera, la cual prefirió los deleites del mundo y desechó la sana Palabra de Dios [Sana Doctrina]. Porque sus juicios son verdaderos y justos; pues ha juzgado a la gran ramera que ha corrompido a la tierra con su fornicación, y ha vengado la sangre de sus siervos de la mano de ella [Apocalipsis 19:2]. Hoy en día la mayoría de las iglesias les llama hermanos a cualquiera, los supuestos cristianos llaman hermanos a cualquier miembro de cualquier religión, a los idólatras, a los hechiceros, a los santeros; para ellos no hay diferencia, todos son hermanos, todos entran en un mismo paquete. Cristo dijo: El entonces respondiendo, les dijo: Mi madre y MIS HERMANOS son los que oyen la palabra de Dios, y la hacen [Lc 8:21]. El verdadero hijo de Dios es aquel que entra al reino de Dios; y no se le puede llamar hermanos en Cristo a aquellos que están todavía afuera del Reino de los Cielos.

La principal rebeldía de la falsa iglesia cristiana es la desobediencia al Nuevo Pacto entre Dios y los hombres, que es el evangelio de Cristo. Debemos notar que los apóstoles de Jesucristo y los primeros cristianos fueron mártires por predicar el evangelio de Cristo y no por predicar la ley de Moisés que hasta hoy en día siguen predicando y practicando las iglesias falsas. La gran prostituta representa la infidelidad de la falsa iglesia hacia los mandamientos que dejó nuestro Señor Jesucristo en el Nuevo Testamento. Ella prefirió los deleites del mundo que constituyen el amor al dinero, riquezas materiales, lujurias, alianzas con gobiernos paganos, corruptos, despojo e injusticias en contra de sus seguidores, y toda clase de maldades. Cristo dijo: Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas [Mateo 6:24]. En otras palabras no podemos ser verdaderos cristianos si aún amamos las riquezas y la prosperidad de éste mundo.

7] En la verdadera iglesia cristiana se debe respirar un ambiente de amor de Dios, de justicia, de gratitud, de piedad, de caridad hacia el prójimo, el servicio gratuito de dones espirituales hacia los hermanos necesitados, la misericordia, la bondad, la fe, poniendo en práctica incluso el amor a nuestros enemigos y la certeza de llegar al Reinado de Nuestro Señor Jesucristo. Habiendo purificado vuestras almas por la obediencia a la verdad, mediante el Espíritu, para el amor fraternal no fingido, amaos unos a otros entrañablemente, de corazón puro [1Pedro 1:22].

Los actos de fe y obediencia a Dios según el Nuevo Pacto son:

A]- Arrepentimiento [Hch 17:30]

B]- Bautismo en Agua. [Mateo 3:11]

C]- La Santa Cena, [1Corintios 11:23-25]

III- CARACTERÍSTICAS DE LAS IGLESIAS CON FALSA DOCTRINA:

1] Los falsos Ministros predican bien, pero no hacen lo que dicen. Como dice el refrán: Predican pero no se convierten. Jesús les dijo: En la cátedra de Moisés se sientan los escribas y los fariseos. Así que, todo lo que os digan que guardéis, guardadlo y hacedlo; mas no hagáis conforme a sus obras, porque dicen, y no hacen [Mateo 23:2 -3].

También, alaban a Dios pero su corazón está lejos de él. Este pueblo de labios me honra; Mas su corazón está lejos de mí. Pues en vano me honran, enseñando como doctrinas, mandamientos de hombres [Mateo 15:9].

Reglas inventadas por los religiosos:

A] COBERTURA: La Biblia no menciona en ninguna parte que las denominaciones sean cobertura de los cristianos, como dicen muchos líderes. El apóstol Pablo jamás mencionó esta terminología en sus cartas. El apóstol pablo ensenó el sometimiento: SOMETEOS unos a otros en el temor de Dios [Ef 5:21].

El apóstol Pablo enseñó la coyuntura: de quien todo el cuerpo, bien concertado y unido entre sí por todas las COYUNTURAS que se ayudan mutuamente, según la actividad propia de cada miembro, recibe su crecimiento para ir edificándose en amor [Ef 4:16].

B] PADRE ESPIRITUAL: Solamente a nuestro Dios se le puede llamar así [2 Corintios 6:18]: Y seré para vosotros por Padre, Y vosotros me seréis hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso. Quiere decir que somos hijos espirituales de Dios.  [1 Pedro 1:17]: Y si invocáis por PADRE a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación. No se le puede llamar Padre Espiritual a ningún Ministro, Diácono o Servidor como acostumbran algunas iglesias. [Mateo 23:8-9] 
Jesús dijo: y todos vosotros sois hermanos. De acuerdo a la Palabra de Dios todos somos hermanos en Cristo e hijos espirituales de Dios el Padre, y nadie es padre espiritual de nadie. Es por eso que hay tanta soberbia en las iglesias; porque se interpreta mal la Pabra de Dios y la enseñan erradamente. Padre espiritual lo utilizan los brujos y los hechiceros. [1Corintios 4:15]: Porque aunque tengáis diez mil ayos en Cristo, no tendréis muchos padres; pues en Cristo Jesús yo os engendré por medio del evangelio. El apóstol Pablo llamo a muchos a los pies de Cristo y los engendró por medio del evangelio, pero nunca se hizo llamar Padre Espiritual de nadie.

C] PACTOS: En la Biblia solo existen pactos hechos por Dios con los hombres y no pactos hechos por los hombres con Dios; en otras palabras cuando le dicen a usted haga un pacto con Dios y siembre su diezmo, le están mintiendo, y engañando para sacarle su dinero. Hay muchas cosas que parecen lícitas, pero no todas convienen [1Co 6:12]. Es muy común que los líderes religiosos pidan este tipo de ofrenda (semilla), pero no para expandir la predicación del evangelio; sino para construir grandes templos y hacerse famosos a costilla de la gente.

D] PASTORA: La palabra Pastora como Ministro de una congregación no aparece en la Biblia. Hubo grandes siervas de Dios en la historia bíblica. En el Nuevo Testamento hubo una diaconisa que se llamaba Febe [Ro 16:1]. La mujer es una ayuda idónea del marido y debe estar sujeta por naturaleza al varón y eso es bíblico, no que la mujer debe estar por encima del hombre o ser cabeza, o ser dirigente sobre el varón; la Biblia habla de sumisión de la mujer [Tito 2:5]; [1P 3:1]; [Col 3:18]. Muchas mujeres pastoras predicando en el púlpito y sus maridos humillados y sentados en las bancas.

E] OFICIOS: En el Nuevo Testamento se le llama Pastor mayormente a nuestro Señor Jesucristo. [Juan 10:11- 16].

[Efesios 4:11] Y él mismo constituyo a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros. [Eso es para perfeccionar el cuerpo de Cristo], o sea la Iglesia.

Los oficios para un dirigente Cristiano son: Anciano, Presbítero, Pastor, Ministro, Siervo de Dios. [1Timoteo 5:19] [1Timoteo4:6] [Hechos 14:23] [Hechos13:5], [Colosenses 1:7] y [Colosenses1:25], [Romanos 15:16]. Los títulos que tienen estos supuestos siervos de Dios son: Doctor, Licenciado, Teólogo, Científico, Catedrático, Seminarista, etc. A Lucifer también le gustan los títulos. Cuando Ud. vea un dirigente de una iglesia con muchísimos títulos, huya de esa iglesia. Ellos usan títulos; la Palabra de Dios menciona oficios, o dones.

F] ARREBATAMIENTO DE LA IGLESIA: Hay una falsa doctrina que predican que el arrebatamiento es después de la tribulación; es un error doctrinal; esa es una mentira satánica, y esto ha producido mucha confusión. Confunden a la gente con [Mateo 24:29-31] [Apocalipsis 7:14]. Tenga cuidado con las malas interpretaciones de la Biblia. Los indoctos e inconstantes tuercen para su propia perdición [2Pedro 3:16].

G] GRAN TRIBULACION DE SIETE AÑOS: En ningún pasaje de la biblia aparece esta frase, más bien la palabra de Dios específica que la gran tribulación durará tres años y medio o 1,290 días [Daniel 7:25] [Daniel12:7] [Daniel 12:11] [Daniel 12:12] [Apocalipsis 12:6] [Apocalipsis 12:14]. La Gran Tribulación no dura siete años; eso es un error doctrinal por parte de gente que quiere enseñar y confunde a la gente.

H] ARBOL DE NAVIDAD: La idolátrica adoración en altares bajo los árboles los aborrece Dios. [Deuteronomio 12:2] [Deuteronomio 16:21] [1Reyes 14:23] [2Reyes 16.4] [2Reyes 17:10] [Isaías 57:5] [Ezequiel 6.13] [2Crónicas 28:4] [Jeremías 2:20] [Jeremías 3:6] [Jeremías 3:13]. Hay muchas iglesias supuestamente cristianas que ponen cerca del púlpito un árbol de navidad y no solo eso, muchas encienden velas.

I] TEOLOGÍA DE LA PROSPERIDAD: Esta frase no aparece en ninguna versión del Nuevo Testamento, es otro
engaño de Lucifer, o sea que no es parte del Nuevo Pacto entre Dios y los Hombres; por lo tanto, no es válida para nuestros días. Además, Nuestro Señor Jesucristo predicó todo lo contrario, y le dijo al joven rico que si quería la vida eterna debía compartir sus riquezas con los pobres. [Mateo 19:21] [Lucas 6:20] [Lucas 12:33]. Asimismo, Nuestro Señor Jesucristo no acumuló riquezas cuando vivió en éste mundo. [Mateo 8:20].

J] PARE DE SUFRIR: Los verdaderos cristianos consideran que sufrir en este mundo por la causa de Cristo constituye gozo para alcanzar la vida eterna. [Hechos 5:41]. El verdadero cristiano debe entregar su vida a Cristo y adecuarse a las circunstancias que le toca vivir. El Apóstol Pablo dice: Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad. [Filipenses 4:12].

Otros pasajes: [1Pedro 3.17] [Apocalipsis 2.10] [Juan 12.27].

K] PROFETAS: De acuerdo a lo que dice nuestro Señor Jesucristo en [Lucas 16:16]. La Ley y los profetas eran hasta Juan El Bautista. [Efesios 4:11] Profeta es un don de Ministerio del Cuerpo de Cristo, bajo el Nuevo Pacto; y solamente para edificación de la Iglesia, para amonestar y exhortar al pueblo de desvíos doctrinales o pecados de algún miembro, y no para profetizarnos prosperidad y abundancia, oro, plata y piedras preciosas. Hoy en día se autonombran profetas cualquier hijo de vecino, y profetizan estupideces para engañar al pueblo de Dios y saquearles el dinero, profetizan de aquí y del más allá, ya en el mundo no soporta el peso de tantos falsos profetas que hay. Los profetas modernos son enviados de Lucifer. No se deje engañar.

2] Los supuestos Pastores en la actualidad hacen de la Biblia una mezcolanza entre el Antiguo y Nuevo Testamento, lo cual dificulta el entendimiento. Sus objetivos son lograr confundir y mantener controlados a sus seguidores; contraviniendo lo que Cristo dice: La ley y los profetas eran hasta Juan; desde entonces el reino de Dios es anunciado, y todos se esfuerzan por entrar en él [Lucas 16:16].

Por las palabras de nuestro Señor Jesucristo, es obvio entonces que después de Juan El Bautista ni la ley de Moisés sigue vigente, ni se pueden continuar agregándose profecías, todo eso se clavó en la cruz del calvario. Sin embargo, Cristo dejó en claro que todas las profecías del Antiguo Testamento se cumplirán hasta el final de los tiempos. Pero más fácil es que pasen el cielo y la tierra, que se frustre una tilde de la ley [Lucas 16:17].

En otras palabras, aunque la ley de Moisés y la enseñanza de los profetas ya están concluidas, las profecías del Antiguo Testamento que aún no se han cumplido, continuaran cumpliéndose hasta el final de los tiempos.

3] Los líderes falsos no respetan el Nuevo Pacto entre Dios y los hombres que es el Nuevo Testamento, el cual fue predicado y revelado por el Hijo de Dios; que es Nuestro Señor Jesucristo. No predican sobre la gracia de Cristo porque no les conviene financieramente, incumpliendo así la sana doctrina. Cualquiera que se extravía, y no persevera en la doctrina de Cristo, no tiene a Dios; el que persevera en la doctrina de Cristo, ése sí tiene al Padre y al Hijo. [2Juan 1:9].

4] Sus equivocados dirigentes ponen en vigencia antiguos mandamientos de la ley de Moisés, los cuales eran para los antiguos Israelitas y no para nosotros los cristianos que actualmente debemos vivir en fe y gracia en nuestro Señor Jesucristo. Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios [Romanos 7:4]

Porque el fin de la ley es Cristo, para justicia a todo aquel que cree [Romanos 10:4]. En Cristo todo es nuevo, una nueva creación. El fin de la Ley era hablar y anunciar a Cristo.

Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz [Efesios 2:14-15].

De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído [Gálatas 5:4].

En otras palabras, las personas que practican la ley de Moisés se han apartado de Cristo; además, este versículo nos enseña que no podemos estar en ambos pactos a la vez, como lo hacen la mayoría de Iglesias, ahora debemos estar únicamente en el Nuevo Pacto de la gracia y fe en nuestro Señor Jesucristo y ya no más con la ley de Moisés. El Antiguo Testamento solo fue una guía con profecía para llegar a Cristo. Cristo abolió la Ley Mosaica con su muerte en la cruz.

De manera que la ley ha sido nuestro ayo, para llevarnos a Cristo, a fin de que fuésemos justificados por la fe. Pero venida la fe, ya no estamos bajo ayo [Gálatas 3:24-25].

De manera que con la muerte de Cristo en la cruz del calvario, ya no hay más Ley que nos someta, quedó abolida para siempre y somos libres de la Ley. El Nuevo Testamento quedó confirmado con la muerte de Cristo.

Porque donde hay testamento, es necesario que intervenga muerte del testador. Porque el testamento con la muerte se confirma; pues no es válido entre tanto que el testador vive [Hebreos 9:16-17]. Cristo murió para confirmar el Nuevo Pacto.

5] Reiteramos, que los mandamientos específicos de la ley de Moisés aunque son santos y dados por Dios al pueblo de Israel ya no están en vigencia para nosotros, porque Cristo los resumió y los convalidó para todas las naciones. Muchas iglesias continúan poniendo en práctica esos antiguos mandatos. Ejemplos: Las Primicias, El Séptimo Día, El Día de Reposo o Guardar el Sábado, La Circuncisión y otros inventados, que solo les interesan a los falsos Ministros.

Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas [Gálatas 3:10].

La ley de Moisés consta de 613 disposiciones y ninguna persona común ha podido cumplirla, ni siquiera los antiguos Israelitas; solamente nuestro Señor Jesucristo pudo cumplirla, para poder confirmar el Nuevo Pacto.

Pero venida la fe, ya no estamos bajo ayo, pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús [Gálatas 3:25-26]

6] Los falsos dirigentes en la actualidad continúan pidiendo diezmos en todos los servicios por predicar el Evangelio de Nuestro Señor Jesucristo; contraviniendo el mandato de Cristo. Hacen una mala interpretación del diezmo utilizando [Malaquias 3:10] para engañar a la gente y maldecirlos; este pasaje dice: Malditos sois con maldición. Dios mismo profirió estas palabras contra los hijos de Jacob (israelitas); No a la iglesia de Cristo; la iglesia de Cristo esta lavada con la sangre del Cordero. Tenga cuidado cuando lo maldicen desde el púlpito por no dar su diezmo; le aseguro que se irá a su casa con una maldición por parte de estos falsos ministros y 
caerá en pobreza.

Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia [Mateo 10: 7-8].

Además, el Apóstol Pablo dice: ¿Pequé yo humillándome a mí mismo, para que vosotros fueseis enaltecidos, por cuanto os he predicado el evangelio de Dios de balde? [2Corintios 11:7]

El Señor Jesucristo únicamente uso la palabra diezmo para desenmascarar las maldades que hacían los fariseos, a personas que estaban bajo la Ley; Jesús les dijo: ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello [Mateo 23:23].

El Señor Jesucristo le da mayor importancia a la Justicia, la Misericordia y la Fe y no al Diezmo. Algunos Ministros con el afán de continuar poniendo en práctica el Diezmo, dicen que el mismo no tiene su origen en la Ley de Moisés, sino en el Diezmo que Abraham le entregó a Melquisedec Rey de Salem, descrito en [Génesis 14:20]; pero este acto no tiene nada que ver con lo que hoy realizan los Ministros en las iglesias, por las siguientes razones:

A] El Diezmo que Abraham le entregó a Melquisedec fue voluntario y no regido por ninguna ley como lo presentan hoy día estos supuestos ministros, basados en [Malaquías 3:10]

B] Este Diezmo dado por Abraham a Melquisedec fue practicado por una victoria o botín de guerra en favor de Abraham y no por el ingreso generado por el trabajo de Abraham. En otras palabras esta ofrenda de Abraham al Sacerdote Melquisedec pudo haber sido del 5, del 15 o hasta del 100%, si así lo hubiera deseado Abraham, y no por eso podríamos convalidar esa regla dentro de las iglesias en la actualidad. Hay muchas personas que practican el diezmo de [Malaquías 3:10] y viven en extrema pobreza.

C] Además, Abraham le dio el Diezmo a un Sacerdote Inmortal y no a hombres mortales. En el caso de los levitas, los diezmos los reciben hombres mortales, en el otro caso, los recibe Melquisedec, de quien se da testimonio de que vive.

Y aquí ciertamente reciben los diezmos hombres mortales; pero allí, uno de quien se da testimonio de que vive [Hebreos 7:8].

7] Los falsos guías religiosos continúan solicitando ofrendas a la congregación para la compra de terrenos y para la construcción de grandes templos, contraviniendo así la Palabra de Dios, la cual dice: Que Dios no habita en templos hechos por manos de hombres. El Dios que hizo el mundo y todo lo que en él hay, puesto que es Señor del cielo y de la tierra, no mora en templos hechos por manos de hombres [Hechos 17:24].

Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación [Hebreos 9.11].

En otras palabras los verdaderos cristianos actualmente tenemos nuestro templo y Sumo Sacerdote en el cielo y no en la tierra. Recordemos también que Dios no envió a su Hijo Jesucristo al mundo para construir grandes edificios o templos y mucho menos hacer mercadería de la gente u otras cosas.

Debemos estar alertas con los engaños de Lucifer, que utiliza toda esta clase de gente, falsos maestros, falsos profetas y falsos ministros del evangelio que utilizan las artimañas del error para arrastrar a las grandes masas a la perdición.

¡Gracia y Paz del Señor!



 

 







LA SANIDAD EN LA CRUZ DEL CALVARIO

La cruz de Cristo, junto con la resurrección, es el corazón de la fe cristiana; es la médula del mensaje del evangelio. En la cruz, al pecado y a la enfermedad se les despojaron de su aguijón. Cuando miramos hacia la cruz, vemos a Jesús con las manos, los pies y el costado heridos; un segundo vistazo revela una tumba abierta y sabemos que la redención de la maldición del pecado tan largamente tipificada se ha «hecho»; nuestra esperanza surge por encima de las nubes cuando vemos a Jesús exaltado por nosotros. «Por su llaga fuimos nosotros curados» [Isaias 53-5]

La sanidad y la serpiente de bronce levantada

En los tiempos de Moisés, Dios proveyó un símbolo gráfico del poder de sanidad de la cruz [Nm 21.5–9]. El pueblo pecador provocó al Señor con sus acusaciones continuas contra Moisés y aun contra el mismo Dios. La naturaleza pecaminosa, adámica, del pueblo estaba fuera de control; la maldición del Edén se había manifestado a plenitud. Dios les daba el maná a diario, pero odiaban hasta su gusto, menospreciando la provisión de la gracia de Dios. Llegaron al punto de transferir su odio a Dios y al líder que El les dio. Sus excesos pecaminosos de disputas y contiendas frenaron el tan deseado viaje a la tierra prometida. Sus actos y actitudes de rebeldía ocasionaron una aflicción horrible a todo el campamento; multitudes cayeron a causa de las mordeduras de las «serpientes ardientes». Parecía reinar la muerte. Sin embargo, como siempre, Dios en su gracia proveyó un remedio para dar sanidad. Por mandato divino, Moisés puso una serpiente de bronce sobre una asta con la promesa de que todo aquel que mirara con fe a la serpiente de bronce sería restaurado. Había vida en una mirada, gracia en un vistazo, victoria en una visión del emblema de la redención del pecado juzgado y expiado.

La clave de la sanidad divina.

La plaga de serpientes ardientes enviada sobre el pueblo de Dios fue, en realidad, un castigo que ellos mismos se infligieron debido a su frecuente murmuración. Dios permitió que su juicio se aviniera a la presunción popular, y muchos murieron por la mordedura de las serpientes. Pero en respuesta al arrepentimiento de su pueblo, Dios prescribió que se erigiera una serpiente de bronce, y todo aquel que levantara la vista con fe hacia ella sería sanado. Jesús se refirió a este relato en [Juan 3.14, 15], al implicar que la serpiente de bronce prefiguraba su crucifixión. Nuestra sanidad, tanto espiritual como física, viene de poner nuestros ojos en el Cristo crucificado e identificamos con Él, ya que por su herida fuimos sanados [1P 2.24].

La sanidad y el Cordero de Dios levantado

Vemos claramente en [Números 21] que surgieron dos remedios y beneficios distintos al mirar el símbolo del Cristo crucificado. Las bendiciones fueron el perdón de los pecados y la sanidad de la enfermedad que afligía al cuerpo. Los beneficios de la gracia también eran dos: primero, el espiritual, por la limpieza de sus almas manchadas de pecado, y segundo, el físico, por la sanidad de las mordeduras de las serpientes. La cuerda de rescate, que parte de la cruz hacia la humanidad afligida por el pecado, tiene dos cabos de rescate: La redención del alma y la sanidad para el cuerpo. Sabemos que la interpretación que hacemos es correcta porque lo aclara el pasaje central del Nuevo Testamento: [Juan 3.14–17].
La palabra salvo del versículo 17 de este pasaje se refiere a una salvación completa, a una redención que abarca toda la persona. Cuando Jesús dijo: «Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él», se refería a la salvación completa de la persona, cuerpo y alma. El utiliza la palabra salvo con un significado de salvación tanto física como espiritual, digamos una salvacion completa, Dios no hace las cosas a medias.

Un remedio de sanidad que caducó

Se debe dar una advertencia al considerar la serpiente de bronce que Moisés levantó en el desierto. El lo hizo por mandato de Dios para dar sanidad a los israelitas enfermos y moribundos. La serpiente de bronce sobre una asta era un símbolo orientado hacia el futuro, al cumplimiento del tiempo cuando Jesús, el Redentor prometido, vendría para cumplir todas las tipificaciones, sombras y símbolos del Antiguo Testamento. Cuando levantaron a Jesús en la cruz, vino a ser lo que la serpiente de bronce representaba. Ahora sólo es necesario ejercitar fe en la obra consumada de la cruz.
En [2 Reyes 18.3- 4] se menciona una práctica de alabanza a la «serpiente de bronce», que el buen rey Ezequías abolió. La serpiente de bronce se dio para un momento y sólo como señal del juicio y la expiación del pecado del pueblo. No se hizo para que se convirtiera en un objeto de alabanza. Señalaba hacia adelante, a la muerte vicaria y propiciatoria de Cristo en la cruz donde se juzgaba todo el pecado. El sacrificio de Cristo se llevó a cabo de una vez y para siempre, y no iba a repetirse; era una obra consumada. Honramos el recuerdo, no la cruz en sí, la cual fue un instrumento atroz para dar pena de muerte, sino el sacrificio que se ofreció allí para nuestra salvación. No es la cruz quien nos salva, sino la fe en Cristo y su obra de expiación.
Si procuramos encontrar sanidad y perdón en un objeto con forma de cruz o en algún amuleto, perpetuamos un estilo de alabanza abusiva como la que ocurrió con la serpiente de bronce y que el rey Ezequías abolió. Quizás hayan algunos que utilicen los objetos sólo para recordar los hechos y las realidades espirituales; pero en algún momento, invariablemente, los objetos de recuerdo se convierten en objetos de alabanza. Algunos pueden evitar el abuso, pero otros menos entendidos y que los imitan pueden desembocar en un acto de idolatría.
Además, si miramos únicamente a la cruz, avanzamos sólo hasta la mitad del camino, pues la obra completa de salvación para el cuerpo y el alma debe incluir la tumba vacía, la gloriosa resurrección. Cristo no sólo murió, también resucitó y está sentado a la diestra de Dios para ser nuestro intercesor y Sumo Sacerdote. La obra de la cruz compró nuestra salvación, pero el caudal de beneficios gloriosos fluye desde el asiento de misericordia del trono de gracia. El Salvador al que adoramos es el mismo Cristo viviente hoy, ayer, mañana y siempre.
Tome nota de ejemplos contemporáneos en que ha oído, o tiene conocimiento, de que la superstición se ha proyectado en objetos para procurar la bondad de Dios.

La sanidad de Dios y el Cordero de la redencion levantados


Otro pasaje de las Escrituras que hace referencia a Jesús «levantado» se encuentra en [Juan 8.26–30]. El mundo, incluso los discípulos de Jesús, en realidad no lo conocían como el Salvador y Redentor hasta que murió y resudtó. Lo conocían como el gran Maestro, hasta como el Mesías que regiría sobre un reino venidero. Pero sólo la cruz lo reveló como el sufriente Cordero de Dios que quitaría los pecados y aflicciones del mundo, a pesar de que Juan el Bautista lo presentó como tal.


Como el Señor Jesucristo murió en la cruz por nuestros pecados y aflicciones, millones han llegado a conocerlo como su Salvador y Sanador.
«Y por todos murió, para que los que viven, ya no vivan para sí, sino para aquel que murió y resucitó por ellos. De manera que nosotros de aquí en adelante a nadie conocemos según la carne; y aun si a Cristo conocimos según la carne, ya no lo conocemos así. De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas» [2 Co 5.15–17].



Es posible que no haya un pasaje más importante en el Nuevo Testamento que Juan 12. Los griegos buscaban a Jesús; quizás fueron a invitarlo a que llevara sus enseñanzas a Grecia; a lo mejor eran como el macedonio [griego] que aparece en [Hechos 16], quien en la visión de Pablo, vino a ayudarlos. Los griegos de Juan vinieron muy temprano; antes de la cruz.
Jesús les explicó que la hora de su glorificación se acercaba. ¿Qué otro grupo de hombres hubiera llamado a su hora de ignominia el momento de gloria? Jesús la llamó la hora en que Él sería glorificado. No ignoraba la espantosa amargura del sufrimiento de la copa del Calvario, pero en un momento le pasó por la mente que el Padre podría salvarlo del espanto de cargar el pecado y de sufrir la derrota aparente de la tumba. Pero de inmediato se sometió voluntariamente al plan del Padre y surgieron palabras de triunfo: «Mas para esto he llegado a esta hora». Vino para ser plantado; declaró que para tener una cosecha de redención, la semilla de provisión tenía que caer en tierra, pero que el grano de trigo plantado produciría una cosecha mundial de almas salvadas hasta los confines de la tierra.
Entonces Jesús dijo: «Y yo, si fuere levantado de la tierra, a todos atraeré a mí mismo». Podía ver las multitudes de enfermos y culpables dejando sus cargas aplastantes al pie de la cruz. ¡Con razón dijo que la hora de su gloria había llegado! Pablo, en [Filipenses 2.5–11], expone perfectamente acerca de la humillación y la exaltación.

La oración eficaz para sanidad levantada

Existen momentos cuando los seguidores redimidos del Señor entran en comunión con sus sufrimientos y por consiguiente se transforman en siervos más consagrados y eficaces. Los apóstoles de Jesús, en su esfuerzo por llevar las buenas nuevas de la salvación completa que emanó de la cruz y de la tumba vacía, sufrieron persecución severa. En especial sufrieron al tratar de predicar las buenas nuevas de la resurrección. Los encarcelaron y amenazaron con castigos mayores si continuaban con la predicación pública de la resurrección de Jesús. Los apóstoles se reunían para informar respecto a las amenazas. Se refrescaban las mentes acerca del propósito de la venida de Cristo a la tierra y del significado de la cruz y la resurrección. Después se unían en la siguiente oración:
Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo denuedo hablen tu palabra, mientras extiendes tu mano para que se hagan sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús. Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.
[Hch 4.29–31]
Los discípulos dijeron, en efecto: «Señor, sabemos que tenemos salvación completa en Cristó, tu Hijo, adquirida con su muerte propiciatoria en la cruz. Vimos que una gran victoria surgió de tu evangelio a través de la sanidad de un cojo; ahora se nos ha prohibido la predicación de la resurrección en Jerusalén; Señor, extiende tu mano para sanar los enfermos para que nos dé un renovado denuedo para predicar la verdad a pesar de los sufrimientos». El Señor les respondió, enviándoles un terremoto espiritual privado y con esto un nuevo Pentecostés y un denuedo renovado. Luego, Dios hizo grandes milagros de sanidad a través de Pedro, Felipe y Esteban.
Y por la mano de los apóstoles se hacían muchas señales y prodigios en el pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón. De los demás, ninguno se atrevía a juntarse con ellos; mas el pueblo los alababa grandemente. Y los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de mujeres; tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y lechos, para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos. Y aun de las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos y atormentados de espíritus inmundos; y todos eran sanados.
[Hch 5.12–16]
La proclamación denodada de la resurrección de Jesús de la tumba, junto con la enseñanza de que el Señor era un Salvador y Sanador viviente, atrajo a multitudes al Reino de Cristo.


Dios le dio a los discípulos denuedo porque deseaban, por encima de cualquier pensamiento de preservación personal, que el evangelio de salvación completa avanzara llevando redención y sanidad a las incontables multitudes de personas enfermas y plagadas de culpa. Parece que resultados similares ocurren hoy en día donde el pueblo de Dios ora pidiendo denuedo mediante el poder del Espíritu Santo de Dios.

Un clamor por misericordia sanadora levantada

Un relato muy interesante de un milagro es el de la sanidad del ciego Bartimeo y que usted puede leer en [Lucas 18.31–43].
En el último viaje a Jerusalén, antes de llegar a Jericó, Jesús les explicó a sus discípulos que iba a ser traicionado, insultado y crucificado, pero que se levantaría de entre los muertos al tercer día. Los discípulos estaban perplejos por la profecía de su muerte; es más, la predicción estaba más allá de su entendimiento. Después de la enseñanza del Maestro, no podían pensar en otra cosa que en la esperanza predominante de que El había venido a establecer un reino terrenal. En este cuadro no había forma de darle cabida a la muerte. La cruz era algo impensable.
Sorprendentemente, se encontrarían con un mendigo ciego que tendría un concepto más claro de la misión de Jesús que cualquiera de ellos. Cuando el ciego Bartimeo oyó que Jesús de Nazaret pasaba por Jericó, «dio voces, diciendo: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!» Dijo esto dos veces, a pesar de la reprensión de los discípulos. Uno debe preguntarse: ¿Cómo es posible que este mendigo callejero y ciego conozca que Jesús de Nazaret era el heredero del trono mesiánico de David? ¿Cómo conocía las «misericordias firmes de David»? [Is 55.3]. Como «Hijo de David» era uno de los nombres del Mesías, quizás lo escuchó en alguna conversación en la calle, pero, ¿cómo asoció las profecías de las misericordias firmes de David con Jesús para pedirle que tuviera misericordia y le sanara los ojos ciegos desde el nacimiento? Debemos entender que Dios de alguna manera se lo reveló, tal como lo hizo antes con el centurión que supo que Jesús podía sanar a la distancia con la sola palabra. Para buscar los temas en conjunto de «David» y «misericordia», véanse los pasajes siguientes: [Salmo 89.20–24]; [Isaías 55.3- 4]; y [Hechos 13.32–38].
Bartimeo no sabía la profecía de Jesús de Su muerte y resurrección inminentes. Desconocía el significado, que sepamos, de la muerte expiatoria y la resurrección de Cristo, pero sí sabía lo que profetizó el salmista y el profeta Isaías: Jesús sería el Mesías [Hijo de David] y tendría «misericordias firmes» para dar. Sabía bien que David había muerto hacía mucho tiempo y que ya había visto corrupción, pero al parecer sentía que el Hijo de David [Mesías] tendría poder y misericordia para terminar con su ceguera.
Pablo dice, en el sermón de [Hechos 13], que el hijo de David sería levantado de entre los muertos y que el Cristo resucitado otorgaría las misericordias firmes de David, entre las cuales se encuentran el perdón de los pecados y la sanidad de los enfermos. Ambas bendiciones se manifestarían en el ministerio de Pablo en Iconio y Listra.



¿En cuáles áreas tienes un deseo mayor de ver en acción el poder sanador de Dios?
Podemos tener la certeza de que aquel que murió por nuestros pecados y fue levantado para nuestra justificación, todavía le da a los que creen tanto la salvación del alma como la sanidad completa a los enfermos. Aquel que fue levantado en una cruz para morir por nuestro pecado y por nuestra culpa venció la muerte y el jucio de todos los creyentes. Este triunfo abarcó la experiencia de las «misericordias firmes» de David. Las «misericordias firmes» son los beneficios del reino donde el Cordero de Dios ya se ha convertido, espiritualmente, en el León de la tribu de Judá. Si está afligido, clama con fe: laquo;¡Hijo de David, ten misericordia de mí!» Él te contestará: «Tu fe te ha sanado».



Recuerda que la fe mueve montanas; montanas de las dudas del ser humano; Cristo ya ha vencido con todo eso en la cruz del calvario, pon en practica tu fe, que lo demas son cosas que estan debajo de tus pies.



Que el Senor te bendiga. AMEN!